Ejercicios pliométricos en piscina Parte I

Hay que aprovechar el verano y las piscinas en pretemporada.......

El ejercicio pliométrico se fundamenta en el estiramiento rápido del músculo (contracción excéntrica) inmediatamente antes de una enérgica contracción concéntrica.

Un ejemplo es el salto desde la posición en cuclillas. En la posición agachada los músculos de las piernas y los glúteos se alargan. Si desde esta posición en cuclillas el deportista realiza un salto vertical los músculos de las piernas se contraen.

Cuando el movimiento de estiramiento-acortamiento se hace rápidamente, como se produce cuando el deportista salta con caída en flexión de rodillas e inmediatamente realiza un salto explosivo vertical, la calidad elástica de los músculos produce una contracción mucho más potente que cualquier otra contracción.

El entrenamiento de esta propiedad elástica desarrolla músculos más fuertes. (Ver Ejercicios de Multisaltos y Pliométricos en tierra)

Aunque los ejercicios pliométricos frecuentemente se asocian a la mejora del salto, el principio de carga elástica se puede aplicar para la mejora muscular adaptada a otras necesidades del deportista.

El entrenamiento pliométrico en el gimnasio se basa en la repetición de una serie de saltos con caída previa desde una altura determinada. Con este modelo se puede aumentar la fuerza muscular en menos tiempo que el que se invierte con resistencias. Sin embargo, también pueden causar dolor muscular severo e incluso daños.

La frase “el problema no es si el ejercicio pliométrico va a producir alguna lesión al deportista, sino cuándo” define el riesgo de lesión con este método de entrenamiento. Por lo tanto, prudencia siempre cuando se hacen ejercicios pliométricos en tierra firme.

Aunque la realización de este modelo de ejercicios de alto impacto puede causar lesiones, no se debe pasar por alto el hecho de que cuando se practica en un ambiente controlado, con todos los factores de seguridad, los ejercicios pliométricos pueden ayudar a mejorar el rendimiento atlético en áreas tales como el salto vertical, la fuerza explosiva de las piernas y la propiocepción.

La mayoría de las lesiones, como las que se producen en el tejido conectivo que sostiene la rótula en su sitio, la inflamación del tendón de Aquiles y los hematomas en el talón, se atribuyen a los movimientos balísticos de los ejercicios pliométricos hechos en el suelo del gimnasio. La ciclicidad de las cargas, el impacto, y la flexión profunda de las rodillas junto al incremento de la fuerza de impulsión son los factores que contribuyen a las lesiones de los deportistas.

Los efectos negativos de este tipo de entrenamiento disminuyen cuando se ejercita en la piscina.

Hace unos años un equipo de la Universidad Estatal de Ohio en los Estados Unidos investigó la eficacia de este tipo de entrenamiento en el agua y mostró mejoras en el salto vertical sin diferencias significativas entre los efectuados en la tierra y en el agua. Los deportistas sumergidos en el agua mostraron también mejoras significativas en la propiocepción y el equilibrio.

Llegaron a la conclusión que los ejercicios en la piscina basados en el entrenamiento pliométrico es una alternativa para los deportistas que quieren sus beneficios sin los posibles riesgos de lesión.

  • Los ejercicios en el agua tienen los mismos beneficios en la fuerza muscular que las sesiones hechas en un gimnasio.
  • El impacto no existe en el agua. Las exigencias impuestas en el agua a los músculos, los huesos y al tejido conjuntivo no suelen dar lugar a lesiones.
  • Cualquier actividad de carga mejora la densidad mineral ósea.

Objetivos

Los ejercicios pliométricos ayudan a desarrollar la fuerza explosiva de los principales músculos de las piernas y las rodillas. Es eficaz para mejorar la potencia, la fuerza y la velocidad de los deportistas.

Para los deportistas que no han terminado su fase de crecimiento y para los que se recuperan de lesiones, el efecto positivo sobre reducción de las posibles lesiones es muy superior a la reducción del aumento de fuerza.

Además, cuando los huesos se doblan ligeramente como lo hacen en los ejercicios pliométricos, se estimula el crecimiento óseo. Esto puede ser especialmente beneficioso para los adolescentes que están en el momento crítico de la formación del hueso.

Ventajas de los pliométricos en piscina

Uno de los beneficios evidentes del deportista especialmente centrado en la mejora del salto vertical, es que el impacto del aterrizaje disminuye significativamente en el ejercicio en el agua, lo que reduce el estrés y la tensión en los músculos y las articulaciones, y por lo tanto la incidencia de lesiones.

El riesgo de lesión es lo que hace del entrenamiento en el medio acuático una opción atractiva para las personas interesadas en incluir la pliometría en su rutina de ejercicios.

Desventajas de los pliométricos en piscina

La adaptación de los ejercicios al deporte concreto y al medio ambiente es un factor importante a considerar.

En este contexto la pliometría en tierra produce una gran tensión sobre las articulaciones. Sin embargo, siempre y cuando no se produzcan lesiones o dolor el entrenamiento en tierra firme crea una respuesta más adaptada a las exigencias del deporte específico.

Presión hidrostática.

Existe una relación inversa entre el nivel del agua y el peso corporal que se apoya en el sistema músculo-esquelético. Sumergido en una piscina con el agua hasta el cuello, una persona tiene aproximadamente el 10% de su peso. Colocado el nivel del agua a la altura del pecho, el peso del cuerpo aumenta hasta el 30%, y aumenta al 50% con el agua a la altura de la cintura. Por lo tanto, cambiando el nivel del agua se aumenta o disminuye la carga sobre el sistema músculo-esquelético, lo cual es muy útil para la rehabilitación y la prevención de lesiones.

El agua también aporta resistencia a los movimientos laterales, con lo que aumenta la intensidad del trabajo y beneficia potencialmente la resistencia.

Normas.

Recomendamos adoptar los principios de los ejercicios de tierra: volumen, intensidad, altura, frecuencia y tiempo de recuperación.

Intensidad. Se recomienda iniciar con ejercicios de baja intensidad, por ejemplo con pequeños multisaltos en el fondo de la piscina semejante a los ejercicios en tierra, progresando hasta los saltos a fondo desde el borde de la piscina. Esta recomendación se hace evidente para los deportistas que vuelven a la actividad después de una lesión y para los jóvenes en las etapas formativas.

También se recomienda calentar con ejercicios de baja intensidad dinámica antes de pasar a los ejercicios pliométricos. La profundidad del agua determina la fuerza de impacto: a menor profundidad mayor impacto.

Volumen. Pliometría con salto profundo: iniciar con 20-30 saltos desde el borde de la piscina y progresar hasta 60 contactos por sesión.

Frecuencia. Se necesita una recuperación entre sesiones de dos a cuatro días.

Recuperación. Para mejorar la producción de energía es obligatoria la recuperación completa entre repeticiones y series.

Calentamiento. El calentamiento y los estiramientos finales son especialmente importantes debido al alto nivel de contracciones musculares excéntricas.

Una práctica adecuada puede ser la siguiente:

  • Estiramientos fuera de la piscina.
  • Largos de piscina, completando una rutina de “estilos”.
  • Combinar los largos con ejercicios “Running pool”
  • Cinco saltos en el fondo de la piscina, hundimiento y saltar alto.
  • Saltos de baja intensidad en el suelo de la piscina.


A lo Coque

Este verano y esta pretemporada.............. imaginación. Aquí os dejo un vídeo fantástico para que veamos como diseñar una sesión específica y no resultar ni aburrida ni pobre.


Sports Training Extreme from DynamicAthlete on Vimeo.

Vuelta al trabajo


Se acabaron las vacaciones.
El próximo 8 de agosto, vuelo destino Barcelona para proseguir el viaje hasta Benicarló. Un año más vuelvo a la casa de mi amigo Carlos Martínez, uno de los entrenadores que más hace por el baloncesto en la comunidad valenciana.

El campús de CB Benicarló poco a poco va haciéndose con un nombre en la comunidad y cada años son más los que se quedan en lista de espera por tener cubiertas todas las plazas nada más abrir el plazo de inscripciones. Todo un éxito que tiene nombre y apellidos, Carlos Martínez.

Pues ya sabéis dónde me tendréis en agosto.

Y después............ espero poder confirmar algunas novedades de cara al año que viene.

En esta primera toma de contacto después del CES, no podía dejar pasar la oportunidad de colgar alguna imagen. Ya sabéis que todas las demás están en el siguiente enlace






Diario de...


A partir del próximo miércoles estaré por tierras malagueña en el CES. Este blog estará un poco abandonado ya que son otros los compromisos que tienen preferencia.

Sí decir que me embarco en otra aventura; voy a intentar relatar cómo es el día a día del CES ´08; quiénes somos, quiénes son y todo aquello aquello que resulte interesante.

Espero poder llevar a cabo esta tarea tal y como se merece . Así que nos vemos en http://ces2m8.blogspot.com

SER PADRES TANTO EN CASA COMO EN LA CANCHA


Juan Carlos Mitjana lleva casi treinta temporadas arbitrando, veintitrés de ellas al máximo nivel nacional e internacional.

Fue jugador hasta los dieciocho años, cuando decidió centrarse en los roles de entrenador y árbitro.

Poco después conseguía el título de entrenador superior y arbitraba en la antigua 1ª División “B”.

Todos estaremos de acuerdo en que uno de los mayores problemas en el deporte de base es el comportamiento de los padres.

Se quejan los directivos de los clubs, los directores técnicos, los entrenadores... Pero los que más sufren las consecuencias son los jóvenes árbitros que, como sus propios hijos, están iniciándose en el mundo del arbitraje y del deporte.

El comportamiento que se genera en la cancha se contradice, en la mayoría de los casos, con la norma de educación que toda familia debe o desea dar a sus hijos.

Los niños no pueden castigar a sus padres cuando éstos cometen acciones que, hechas por ellos, serían castigadas de forma ejemplar.

Hay que hacer entender a quienes no lo ven así, que el hecho de jugar y entrenar es un complemento a la educación.

Todos estamos formando. Formar es cambiar permanentemente la conducta del sujeto como resultado de la práctica.

Los jóvenes adquieren con asombrosa rapidez conocimientos, hábitos, actitudes e ideales, y son por ello fácilmente influenciables.

Aprenden e imitan todo aquello que observan: gestos, menosprecios, palabras violentas, incluso agresiones a árbitros y contrarios.

Lo utilizan en primera instancia como recurso deportivo, si han observado que con ello se consigue el objetivo, pero pueden llegar a incorporarlo como una actitud normal si sus padres, sus líderes, lo realizan.

La práctica deportiva tiene un valor añadido porque refleja realidades y valores que los jóvenes se encontrarán más adelante en la vida.

Se trata de un juego, que además se practica en una etapa de formación personal, y por tanto, el resultado es lo que menos debemos valorar.

No olvidemos que “NO HACEMOS BALONCESTO” sino que “JUGAMOS AL BALONCESTO”.

Todos conocemos el problema, ahora tan solo hace falta ponerle soluciones.

En algunas entidades se realiza una charla al inicio de la temporada a los padres, donde se habla de los objetivos deportivos y educativos, y se les pide una línea de colaboración con la entidad.

Después, a lo largo de la temporada, no suelen intervenir, en la mayoría de los casos, cuando hay incidentes, sobre todo si estos van contra los árbitros.

La Federación sanciona a los Clubs responsables del comportamiento de los padres, y tema resuelto.

Dada la dimensión del problema y las escasas y poco efectivas medidas que se adoptan, debemos atacarlo desde la base, y aplicar el dicho “más vale prevenir que curar”.

El daño producido es irreparable en la mayoría de los casos.

Son los padres que van en la dirección equivocada los que deben ser capaces de reflexionar y de cambiar por propia convicción.

VALORES DEL BALONCESTO

1º) Equilibrio social y emocional
2º) Dotes de mando y sentido de lealtad
3º) Respeto a la autoridad y a las reglas
4º) Adquisición de buenos hábitos de higiene
5º) Sentido del civismo y equidad
6º) Significado de deportividad, saber ganar y perder
7º) Espíritu de colaboración y superación
8º) Derechos que comporta la responsabilidad

DISFUNCIONES DE PADRES

1º) Quieren que sus hijos jueguen más tiempo que los demás
2º) No les gusta que jueguen los compañeros más malos, porque les hacen perder los partidos
3º) Amenazan con llevarse a sus hijos a otros clubs, si no se les aceptan ciertas exigencias
4º) Dan indicaciones a los hijos durante los entrenamientos y partidos
5º) Critican las decisiones de los entrenadores y a los compañeros de sus hijos en público
6º) Critican e insultan a los árbitros
7º) Provocan enfrentamientos y amenazan e insultan a los jugadores contrarios y sus acompañantes
8º) Les gusta hacer demostraciones en público de sus supuestos conocimientos del juego.

Todos debemos trabajar conjuntamente: los hijos en la medida que puedan, los directivos no aceptando estos comportamientos, pero no de palabra sino de hecho.

Es un trabajo de consistencia, y de repetirles y hacerles ver que este tipo de comportamiento no les hace ningún bien a sus hijos.

Como decía una carta publicada por unos alumnos del colegio LLOR a sus padres: “Que suerte tienen aquellos equipos en donde los padres y madres quedan para comer, para salir... después del partido”.

Los jugadores, cuando salen del partido, después de haberlo dado todo, quedan como amigos.

Todos los que han practicado deporte estarán de acuerdo en que las victorias y derrotas se olvidan pronto.

Lo que se recuerda es la forma en que se consiguió.

Intentar ganar como sea no es lo que da sentido al deporte en estas edades, y no se puede consentir “ENGAÑAR PARA GANAR”.

Entendiendo por engañar, conseguir la victoria en el juego mediante la violencia directa o indirectamente.

Por último, no puedo dejar pasar la ocasión para defender con la voz más alta que pueda la labor de los árbitros en estas categorías: ellos también se están formando, y hay que dejarles crecer como árbitros y personas.

Más adelante ya les podremos quizás pedir alguna responsabilidad de su labor.

El deporte, como actividad educativa y formativa, es una poderosa herramienta capaz de aglutinar esfuerzos y derribar barreras idiomáticas, religiosas, culturales y personales.

Sepamos aprovecharlo para formar mejores deportistas, que en el futuro serán personas con responsabilidades y que ayudarán con su esfuerzo y su buen espíritu deportivo a una sociedad mejor.