Cuando el tren silba, ya no para...

Tarea para la mejorar la superación de un defensor estático y atacante en carrera.




1.- Realizar un bote de velocidad largo y cercano al defensor.
Escupir” el balón.









2.- Meter mano sobre interior del balón a la vez que se apoya el pie de lado contraria a mano control balón.









 Superar al defensor atacando por lado balón dirigiendo el bote hacia la espalda del defensor.











1º.- Realizar desde 1c0 teniendo como marca/defensor una silla cercana a la línea de 6,75. El JCB saldrá desde media pista.

2º.- Realizar con un defensor semiacttivo que llevará dos balones sujetos entre los brazos.




SUBTAREA. OPCION B


1.- Finta de cambio por la espalda Ricky. El balón vuelve a la mano inicial de cambio.











2.- Más cambio de mano rápido por delante cerca del defensor.

Realizar idem que en la opción anterior: 1c0 y posteriormente 1c1 semiactivo.












Posteriormente permitir que puedan escoger entre ambas opciones y, ya veremos...




Un granjero tenía sólo un caballo. Un día el caballo se escapó.
Todos los vecinos llegaron diciendo, “Lo siento tanto. Esta es una muy mala noticia. Debes de estar muy molesto”. El hombre simplemente respondió, “Ya veremos”.
Unos días después su caballo volvió con veinte caballos salvajes. El hombre y su hijo metieron a los 21 caballos en el corral.
Todos los vecinos llegaron diciendo, “¡Felicidades! Esta es una muy buena noticia. Debes de estar muy feliz”. El hombre simplemente respondió, “Ya veremos”.
Uno de los caballos salvajes golpeó al único hijo del granjero, rompiéndole sus dos piernas.
Todos los vecinos llegaron diciendo, “Lo siento tanto. Esta es una muy mala noticia. Debes de estar muy molesto”. El hombre simplemente respondió, “Ya veremos”.
El país entró en guerra, y todo hombre joven y en buena condición física fue reclutado para luchar. La guerra fue terrible y mató a todos los hombres jóvenes, pero el hijo del granjero se salvó, ya que sus piernas rotas evitaron que fuera reclutado.
Todos los vecinos llegaron diciendo, “¡Felicidades! Esta es una gran noticia. Debes de estar muy feliz”. El hombre simplemente respondió, “Ya veremos”.