Variar la dificultad táctica. Regla del buey

No son pocas las ocasiones en las que nos encontramos en la tesitura de cómo podemos dificultar la acción de alguna acción táctica en una situación establecida.

Varias son las fórmulas, o mejor dicho, variables; con las que podemos modificar el  nivel de dificultad de cualquier situación. 




Enumeremos algunas de ellas:

* Balón
* Espacio
* Tiempo
* Jugadores

Centrándonos en los jugadores como variable estructural que nos permita el objetivo previsto, vamos a proponer algunas formas para incrementar las demandas perceptivas y decisionales del jugador, es decir; que modificando ciertos elementos estructurales del juego como es el de los jugadores, vamos a obtener un mayor o menor grado de dificultad táctica respecto a la tarea propuesta.

Para ello vamos a seguir el trabajo del Dr. Cárdenas que a tal efecto ha desarrollado.

* Aumentar el número de jugadores, tanto de compañeros como de adversarios. El número de estímulos aumenta considerablemente por lo que el jugador debe incrementar su visión y realizar constantes cambios de focos atencionales.

* Aumentar la proporción de adversarios. Muchos somos los que utilizamos las situaciones de juego constante de superioridad (véase contraataque de 7,8,9, etc) Si tras cada repetición modificamos el número de participantes, variando de de forma constante de situaciones de superioridad a inferioridad e igualdad; obtendremos el resultado propuesto.

* Aumentando el grado de libertad de los oponentes. Pasar de tareas en las que el oponente tiene que ir driblando un balón a la vez que defiende, a situaciones en las que debe mantener un balón entre las manos o que tiene libertad absoluta en sus desplazamientos; nos permiten variar el grado de dificultad táctica con respecto al ataque.

* Introducir obstáculos. En principio estáticos y posteriormente dinámicos. Tareas en las que se compartan espacios. En la sección de ejercicios podréis valorar la operatividad de muchos de ellos respecto a este incremento de demandas.

* Aumentar el número de objetivos a lograr. En una situación de 2c2 no es igualmente compleja  aquella en la que se solicite como objetivo simplemente anotar, que en aquella otra en la que además se delimita cómo se debe anotar y qué elementos técnicos pueden realizar.

* Aumentando el número de alternativas de acción. Situación muy sencilla de comprobar en especial en las ocasiones en las que se plantean nuevas opciones de obtener ventajas con un bloque directo. El jugador al intentar valorar el uso de esas nuevas alternativas precisa mayor capacidad perceptiva y en principio mayor tiempo en la toma de decisiones.



EL BUEY SOLO SE LAME MEJOR. AYUDA A CONSTRUIR EL PENSAMIENTO TACTICO DE TUS JUGADORES, ELLOS SON LOS QUE DEBEN APRENDER A DECIDIR

La "hostilidad del reboteador"

El gran George Raveling afirma que "el rebote es un 75% de deseo y un 25% de habilidad"

Este "deseo" puede reconceptualizarse como intensidad o competitividad, aunque si que estaremos todos de acuerdo que es una variable imprescindible en el rebote.

Siguiendo a entrenadores de la NCAA podemos afirmar como cuatro los fundamentos básicos de cualquier rebote:

* Anticipación. Entendido como los movimientos previos al movimiento de rebote en sí.

* Ritmo correcto. Tanto el desplazamiento como el resto de acciones motrices serán los adecuados entendiéndose tales como una acción global en sí.

* Reacción. Los gestos y movimientos deben ser coordinados y adecuados tanto al móvil como al rival.

* Posicionamiento. El óptimo como resultado de las acciones anteriores.


El trabajo tanto del posicionamiento previo y el resto de movimientos, produce mejores resultados en los jugadores que si el trabajo de rebote se condicionase en exclusiva al trabajo de salto o habilidades similares.

Una primera regla que debe inculcarse en el reboteador defensivo es la de control del adversario incluso antes de concentrarse en el propio rebote.


1º Observa a tu par defensivo. No busques la trayectoria del balón hasta que no hayas buscado primero a tu atacante.

2º Lee la intención de tu oponente. Impide que el atacante se dirija hacia donde tiene previsto.



Raveling afirmaba que el rebote defensivo es "la sangre y las entrañas" del baloncesto. Trabaja el rebote como una acción técnico-táctica más. Planifica su desarrollo y perfeccionamiento



Materiales alternativos en baloncesto

Hace unas semanas compartí unos días con las Selecciones Cadetes de la Federación Ceutí de Baloncesto de cara a su preparación para el Cto. de España que se está jugando estos días en Zaragoza.

Para esta ocasión llevé conmigo al globo como elemento no propio del baloncesto pero que nos permitiría para ciertas tareas mejorar ciertos aspectos y habilidades que eran objetivo del trabajo que fijamos a llevar a cabo.

Os dejo una tarea que se desarrollo con las selecciones minibasket y que permitió no sólo colaborar en alcanzar los objetivos de la sesión, sino que contribuyó ofreciendo información a los entrenadores sobre aspectos técnicos a reforzar en ciertos jugadores así como permitió a los jugadores a conocerse un poco más a si mismo en cuanto a su capacidad para realizar diferentes acciones motrices.



ACTIVACIÓN

TAREA 1.- Descentralizar el balón como foco atencional en el dribling


Cada jugador deberá estar en posesión de un balón y un globo.

Subtarea 1.-  Se permite que los jugadores exploren libremente y se valora qué ejecuciones realizan de forma natural.

Subtarea 2.- Balón baloncesto con mano no dominante. Se les solicita a los jugadores que se desplacen por toda la pista en dribling constante y sin que se el globo toque el suelo, pudiendo únicamente tocarlo con la mano dominante.

Subtarea 3.- Idem anterior pero en esta ocasión mientras el globo está en el aire a cierta altura, deberán realizar un cambio de mano a su elección. Debemos ir animando a que poco a poco su velocidad de ejecución y de desplazamiento sea cada vez más elevada.

Subtarea 4.- Les permitimos que boten con cualesquier mano, aunque obligándoles a un bote muy continuo y potente. El globo deberá permanecer en el aire y no se podrá tocar con ninguno de las manos ni brazos.

Subtarea 5.- Dos grupos situados en cada uno de las líneas de fondo. Todos los globos en la línea de media pista. A la señal y siempre en dribling, los jugadores deberás llevar el máximo número de globos hacia el aro contrario pudiendo sólo utilizar para ello los pies.




LA PRACTICA VALE MAS QUE LA GRAMATICA. CON ACTIVIDADES LUDICAS LOS JUGADORES TRABAJAN MAS Y MEJORAN COMPETENCIAS Y HABILIDADES

La primera victoria


                     Como en todos los ámbitos de la vida, siempre hay una primera vez. Nuestro primer llanto. Nuestros primeros pasos. Nuestras primeras palabras. Nuestro primer día de colegio o de guardería. Nuestro primer amor… El primer beso. Nuestro primer balón de baloncesto.

                  Todas esas cosas están incluidas en nuestro disco duro humano. Antes de nacer nos programan para hacer cierto tipo de acciones o tener un cierto grado de habilidad para realizar algunas tareas. Por mucho que pongamos empeño, cuando no se tiene habilidad para cierta tarea, lo mejor es dejarlo. Recordemos cierto torero que se empeñó hace años en sacar un disco. Si no sabemos cantar, lo mejor es no hacerlo ni en la ducha.

                  Actualmente también hemos tenido noticias de una pseudo restauración de una obra de arte. Si no sabemos restaurar…

                  Después de esta breve introducción se me viene a la cabeza mi primera victoria como jugador de baloncesto. Un momento alegre, sin duda. MENTIRA. Mi primera victoria fue en un partido en el que no jugué ni un solo minuto. Era lógico por cierto, puesto que mis demás compañeros de equipo eran mejores que yo. Mi entrenador, gran amante de los sistemas cerrados y memorizados hasta la saciedad, no supo ver en mí las escasas cualidades que tenía como jugador de baloncesto.

                  El tiempo luego me hizo ver que si no era el mejor, tal vez debiera pensar dejar el baloncesto. Como así fue años más tarde. Mi vida como jugador federado duró solo tres años. Luego dejé mi sitio en el centro de las canchas, por un sitio situado unos metros más atrás: el banquillo. Pero esta vez no lo hice como jugador, donde tantas veces lo ocupé durante los partidos. Esta vez lo hice como entrenador. Y la verdad es que no recuerdo cual fue mi primera victoria. Recuerdo alguna de ellas. Las más sufridas. O las más holgadas. Recuerdo un partido de ir perdiendo de diecisiete puntos al descanso y acabar ganando de uno al final. Otros muchos partidos han pasado sin pena ni gloria por mi vida, que sin duda otros entrenadores habrán grabado en su retina como una gran victoria sobre mi persona o sobre el equipo que dirigía en ese momento.

                  Hay quien incluso después de muchos años, recuerda como me ganó tal o cual partido como si eso hubiese sido el mayor hito de su historia como entrenador.

                  Lo que si os puedo decir, que aún sin recordar cual fue realmente mi primera victoria dirigiendo a un equipo, probablemente, en aquel partido, igual que me ocurrió a mi como jugador, alguien se fue a su casa sin jugar ni un solo minuto. Porque a veces olvidamos que estamos en los equipos de formación para enseñar a jugadores, no para conseguir victorias.

Sesiones Tecnificación con las selecciones FBC

Estos próximos días estaremos en la Ciudad Autónoma de Ceuta con motivo de las Jornadas de Tecnificación con las diferentes Selecciones Autónomas Ceutís, de cara a la preparación de los próximos Campeonatos de España.

Agradecer  tanto a la Federación de Balóncesto de Ceuta como al Intituto Ceutís del Deporte por la confianza puesta en mi trabajo para llevar a cabo estas importantes sesiones de preparación.

Delegados competentes

Hace unos días se la FaB Cádiz editaba para un vídeo en el que se realizaba un compendio de las funciones y obligaciones del delegado de campo y equipo. En él, se pueden encontrar aspectos de normativa de competición, de reglamento de juego y de sanciones tanto reglamentarias como administrativas.

Como entrenador me precupo que todos los integrantes del equipo técnico tengan clara su función respecto del grupo de trabajo, pero sobre todo de qué es responsable.

Es fácil comprobar hoy en día el rol de la gran mayoría de los delegados que acompañan a los equipos de formación. No voy a enumerar todas las acciones punibles que según el reglamento de juego observamos en cada encuentro, pero sí que voy a dejaros una pregunta para vuestra reflexión como entrenador ¿De verdad consideras valioso tener a una persona contando con "crucecitas" los puntos de uno u otro equipo?, ¿es relevante conocer el porcentaje de tiro de un jugador minibasket?, ¿podrías compartir con el resto de entrenadores cuántas horas le dedicas al estudio y reflexión de los datos obtenidos por el "tablilla"?

A mi parecer, desperdiciar recursos humanos para este cometido me parece de una soberbia insuperable.

Entre las mil cien funciones que un delegado de equipo puede tener a lo largo de un encuentro, si que podemos valorar la de toma de datos. Pero, ¿qué datos tomar?, ¿los rebotes de mi "base" de 11 años?

A este efecto os voy a dejar un breve decálogo donde recoge se recogen aspectos interesantes a recoger. Valga como modelo los siguientes puntos informativos que Mignorance nos propone respecto a nuestros principios defensivos base:

1.- Defensa del 1c1. Nos rebasan/no nos rebasan por el centro/ 45º o línea de fondo.

2.- Nuestra línea de pase es correcta/incorrecta. No permitimos que nos anoten en puerta atrás.

3.- Es correcta nuestra primera ayuda y recuperación del par.

4.- Robo de balones en nuestra segunda ayuda defensiva, en nuestra defensa de ayuda y rotación

5.- Defensa correcta de los bloqueos directos/ciegos/verticales indirectos...

6.- Defensa correcta de los cortes desde el lado no balón/lado balón

7.- Acciones de intencionalidad del punteo del lanzamiento

8.- Comunicación defensiva efectiva

9.- Ocupación espacial defensiva según situación balón y par

10.- Ajustes defensivos en situaciones de inferioridad numérica en carrera

11. Etc....


PARA LOS GRANDES VIAJES, ES MAS IMPORTANTE LA COMPAÑIA, QUE EL MEDIO EN EL QUE SE REALIZA. COMPLETA TU TRABAJO RECONSTRUYENDO LAS FUNCIONES DEL DELEGADO DE EQUIPO


¿A quién quieres más...?


Cada vez que escuchaba el comentario de una de esas personas enteradas, que el mundo del deporte hay muchas, diciendo que si tal entrenador gana los partidos por los jugadores o que tal otro los pierde por la gestión que hace de sus jugadores, no podía por más que esbozar una sonrisa irónica o poner esa cara de póker que tanto me caracteriza.
                 
 Los partidos hay que analizarlos en un todo, y no solamente en el día del partido. Sacar conclusiones mientras estas tranquilamente sentado en la grada tomándote unos frutos secos o hablando de la resaca que tienes por el día de ayer, nunca es buena consejera. Es el cuerpo técnico el que vive toda la semana de entrenamientos. Es el cuerpo técnico el que sabe qué jugadora se merece o no jugar los partidos.
                  
 Me he equivocado a lo largo de mi vida en muchas decisiones, pero si hay una cosa que nunca me podrán reprochar es que he sido siempre coherente con mis ideas. Quizás por eso me precede el apelativo de “polémico”. No he sido amigo de numeritos en público. He sido amante del orden y de la disciplina. Si me he enfadado sin motivos, lo he reconocido. ¿Qué alguna vez he sido injusto? Alguna no. Cientos.
                   
He estado abierto siempre al diálogo. Me he desvivido por todo cuanto he hecho en mi vida. A veces sin recibir nada a cambio. A veces sin recibir esa palabra de siete letras que es tan fácil de pronunciar y que tan rápidamente olvidamos: “gracias”. Muchas veces he recibido más de lo que he ofrecido, o por lo menos eso me ha parecido a mí.
                   
Un día escuché a un compañero decir: “pues fulanita no va a jugar ni un minuto hoy, porque durante la semana no ha entrenado como debe”. Fulanita jugó todo el partido menos los dos o tres primeros minutos. Hay que ser coherente con las ideas, por encima de la victoria o la derrota. Y si sabes que no lo vas a ser, mejor callarse la boca y tirar por la calle de en medio.
                   
Y para terminar una pregunta. ¿Quién es mejor Guardiola o Villanova? ¿A quién quieres más, a papá o a mamá? Algunas veces, el mejor es el que mejor gestiona el equipo.

Mientras dormía...

Nuevo "Café con D. Álvaro Pérez"


Me andaba rondando por la cabeza en estos días la idea de volver a entrenar. Ya han pasado unos meses desde que lo dejé, y los fantasmas del pasado me deambulaban de nuevo por el entrecejo. Me imaginé volviendo a sentir ese gusanillo que te entra en el estómago en los momentos antes de los partidos. O en esos momentos en los que debes decidir esa jugada que te lleve al triunfo o por el contrario te conduzca al más estrepitoso de los fracasos.
                  
Me imaginé volviendo a esas tardes sentado delante de los cuadernos de entrenamiento desmenuzando cada uno de los sistemas a los que íbamos a jugar durante la temporada. Si este año apostaría por la defensa zonal, o si por el contrario trabajaría sobre todo la individual. Aunque yo he sido más siempre de defensas alternativas, porque creo que mantiene concentrado tanto al jugador que está en pista como al que está en el banquillo. Pero una cosa es lo que yo piense, y otra muy distinta a donde quiera llegar…
                 
Me imaginé decidiendo a quién le doy el último balón para que se lo juegue. Si jugaré con sistemas cerrados o si por el contrario haremos ataques abiertos a una infinidad de posibilidades. Si haría una mini pretemporada en el parón navideño que tan bien suele irle a los equipos que he entrenado.

Durante unos minutos me imaginé de nuevo cogiendo la pizarra en la que tantas veces dibujé esos movimientos que nunca entienden los jugadores. Me imaginé poniéndome el chándal de tal o cual club o selección. Me imaginé atándome las zapatillas con doble nudo, para que nada turbara mi concentración durante el partido. Me imaginé enfadándome con mis jugadoras porque no llegaron a defender o animándolas cuando robamos aquel balón o conseguimos aquella canasta.

Me imaginé en la soledad del vestuario después de un partido. O incluso antes, cuando llegas el primero y repasas mentalmente todo lo que no debes olvidar. Me imaginé jugueteando con un balón en el banquillo mientras tus jugadoras acaban el calentamiento. Me imaginé pensando una vez más ese quinteto inicial que salte a pista.

Me imaginé saboreando las mieles del triunfo o percibiendo las hieles del fracaso. Me imaginé de nuevo recibiendo la reprobación de aquellos a los que no le gustaba lo que hacía o el halago de los que saben lo que cuesta cada cosa que haces. Me imaginé recibiendo una llamada de aquellos que antes te tenían horas y horas al teléfono preocupándose por ti y por tus cosas, y de los que hace tiempo que no sé nada. Lo cierto, es que yo tampoco los llamo…

Me imaginé todos esos buenos momentos que he pasado conociendo gente, jugadoras, situaciones especiales, viajando de aquí para allá, sacrificando fines de semana, cumpleaños, celebraciones, aniversarios, por aquello que tanto te gusta.

Y fue entonces cuando decidí que tenía que volver. Que mi sitio estaba en las pistas. Gritando, animando, solucionando situaciones, pateándome la pista de un lado a otro…

Por fortuna para mí, todo esto ocurrió mientras estaba en la cama. Cogí la manta, me tapé los brazos porque empezaba a refrescar, y me di la vuelta para el otro lado. Porque todo esto, como dijeron en una de esas películas cursis: “ocurrió, mientras dormía”.

¿Cuándo empieza tú partido?

El calentamiento prepartido es uno de esos instantes en los que como entrenador se valora pequeños detalles que incluso te llegan a prever una victoria simplemente observando un poco al equipo contrario.

El calentamiento es un escaparate donde muestras el potencial de tu equipo, donde los jugadores van concentrándose poco a poco fluyendo una tarea tras otra de forma dinámica y rítmica. Ese es el calentamiento que como entrenadores queremos vivir junto con nuestro equipo.

Para conseguir este calentamiento óptimo, Hidalgo nos propone cumplir con los siguientes preceptos:


1.- Nuestro calentamiento debe estar establecido de antemano, no improvisarlo en el momento. La sensación de organización y control sobre lo que se realiza es esencial.

2.- Que los movimientos sean simultáneos, uno tras otro de forma continua y lo más importante; que los jugadores ejecuten de forma ordenada cada tarea.

3.- Preparar concienzudamente el calentamiento prepartido.

4.- Diseñar tareas novedosas y originales. No realizar siempre el mismo calentamiento.

5.- Además de preparar al jugador física y psicológicamente para el encuentro, también debemos plantear situaciones en las que los jugadores realicen acciones técnicas complejas que dominen y resulten "espectaculares". Esto colabora a mejorar el nivel de motivación del grupo.

6.- Buscar la concentración. El jugador debe ocupar su mente en realizar un buen calentamiento y en previsualizar situaciones del encuentro.



LO QUE MAL EMPIEZA, MAL ACABA
UN PARTIDO EMPIEZA DESDE EL MOMENTO EN QUE ACABAMOS EL ULTIMO ENTRENO. CUIDA TODOS LOS DETALLES

¿Competición si, competición no?

Lo más importante para un educador deportivo, es saber diferenciar el arcaico concepto tradicional del competición por el actual concepto que la entiende como contexto en el cual se da sentido y significatividad al trabajo desarrollado con anterioridad.

Blazquez la define como momento en el que " se pone en juego la afectividad y la emotividad; estimula la búsqueda de la excelencia mediante el entrenamiento; provoca la imaginación y la creatividad; libera energías y catártica agresividades"

N debemos limitar estas experiencias a nuestros jugadores, pero lo que es más importante; no debemos formalizar la competición como el medio para ganar o alcanzar resultados deportivos alejados o contrapuestos a los objetivos formativos que debemos alcanzar.

¿Realmente estas son las premisas básicas que determinan la participación de tu equipo en competición? Reflexiona!!!

Ortega y cols. Nos propone un decálogo para valorar la intervención de la competición en los equipos de formación. Sin duda un buen instrumento para que reflexionemos sobre nuestra actividad y reconduzcamos nuestra labor hacia la formación del jugador y no hacia otros intereses más cercanos a la aprobación social y el aplauso gratuito.

Vamos con él.

1.- Competición si, pero orientada. Buena cosa, reflexionar sobre la argumentación de Blazquez.

2.- La competición debe ser orientada como una sesión de enseñanza más. Preparala con anterioridad,  marca los objetivos formativos y olvídate del tanteo.

3.- Es necesario que el jugador disfrute de muchos minutos  de juego. Quizás debas replantearte en algunos encuentros  que el más competente juegue menos minutos, en beneficio del menos competente que necesita más experiencias.

4.- En los equipos con orientaciones competitivas/ formativas, en el reparto de minutos, deberá primar las posibilidades des de promoción del jugador. Contextualizar e individualiza incluso en los encuentros.

5.- El estilo de juego impuesto por el entrenador en categorías de formación, deberá fomentar la formación, integral, global y genérica del jugador. Por favor, evita jugar a lo ACB.

6.- Sera necesario que el entrenador, y si fuera posible los jugadores, preparen el partido estratégicamente. El jugador debe ser pieza activa de su aprendizaje, incluso en los encuentros.

7.- Justo antes del inicio del partido, el entrenador debe dejar claro los objetivos individuales y grupales,  y lo más importante; que deben realizar para alcanzarlos

8.- Duramte el encuentro la información sobre nuestro equipo tendrá preferencia frente al del rival, así como la información ofensiva primara sobre la defensiva

9.- Es necesario llevar un control exhaustivo de los minutos de juego tanto a nivel cuantitativo como cualitativo (saber si juega minutos importantes)

10.- Las situaciones de "final de encuentro" deben ser entrenadas de manera habitual


EL CAMINO QUE SE SABE, BIEN SE ANDA
TRABAJAR CON LOS MÁS PEQUEÑOS REQUIERE MUCHA PREPARACIÓN Y FORMACIÓN